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Foto:Carlos Betancur, Facultad de Ingeniería

Norman César Mercado Cruz nació el 10 de febrero de 1951 en Sincelejo. Estudio su bachillerato en el Instituto Nacional Simón Araujo, colegio que en ese tiempo era considerado como una de las mejores instituciones educativas de la región Caribe.

Durante su juventud fue un empedernido por la poesía, le gustaba declamar y aprenderse versos. “Y todavía conserva esos dotes poéticos”, afirma su amigo y compañero de oficina el ingeniero Álvaro Gaviria Ortiz. En la vida universitaria Norman se destacó por la actividad deportiva, en disciplinas como el atletismo, el fútbol y el softbol; sin embargo, seguía cultivando gusto por la poesía.

La vocación docente Norman la percibió desde la juventud, cuando le decía a su mamá que se hiciera incapacitar para dictarles clase a los estudiantes de ella en primaria. Y cuando hizo la alfabetización les dictó clases de ciencias naturales a estudiantes de primaria en su colegio.

En su natal Sincelejo vivió hasta que tuvo 19 años de edad. Aunque su inclinación inicial fue estudiar agronomía en la Universidad de Córdoba (más cerca de Sincelejo), en 1970 se ganó una distinción como el mejor bachiller de Colombia, en Sucre, la cual le permitió recorrer diferentes lugares del país. Fue así como conoció de cerca el programa de Ingeniería Electrónica de la Universidad de Antioquia, presentó el examen de admisión y lo aprobó.

“De la Ingeniería Electrónica lo que me atrajo fue el alto componente matemático; porque también consideré en algún momento estudiar matemática pura…” Desde su infancia el profesor Norman César fue amante de los números, debido a que Doña Tulia Inés Cruz de Mercado, su madre, era maestra de escuela. Ella fue la inspiradora de la pasión por la academia: “desde chiquitico yo supe que iba a ser docente”, confiesa en tono jocoso el hijo de don César Augusto Mercado Arias.

Como estudiante de ingeniería se formó resolviendo ejercicios del Álgebra de Baldor, la Geometría de Bruño, entre otros textos que fortalecieron su disciplina y experticia en la solución de problemas de los cursos de las ciencias exactas. “Lo importante en la matemática es tener el talante, el gusto por trabajar con los números”, afirma el profesor Norman Mercado. Y reconoce con picardía que la materia que más dificultad le causó en la universidad fue el español, la cual con mucho esfuerzo aprobó con 3,0.

Durante sus estudios universitarios obtuvo en tres ocasiones matrícula de honor, una distinción que otorga la UdeA a los alumnos con desempeño ejemplar, un reconocimiento que no influía mucho en la economía familiar debido a que Norman ‒por ser hijo de profesora‒ pagaba una cantidad mínima en la Alma Máter.

Su avance destacado en los estudios de Ingeniería le permitió aplicar a una monitoría en el curso de Circuitos digitales en el primer semestre de 1977, con el profesor Oswaldo Pino de la Cruz (QEPD), a quien apoyó en el diseño de las guías del laboratorio, material que se constituyó en la primera publicación del profesor Norman Mercado.

En febrero de 1978 Norman César Mercado Cruz obtuvo su título de Ingeniero Electrónico, no obstante siguió estudiando Ingeniería Eléctrica. En agosto de ese año ganó una convocatoria laboral en la empresa Enka de Colombia, pero el profesor Mauricio Wilches, en ese momento Jefe del Departamento de Ingeniería Electrónica, lo invitó a dictar unos cursos de Ecuaciones diferenciales (o Matemáticas especiales 1) con el propósito de que se preparara para vincularse como profesor de la Universidad. Y en efecto así fue: en octubre de ese mismo año el Decano Álvaro Gaviria lo nombró profesor titular de la Facultad de Ingeniería.

Debido a las políticas de ampliación de cobertura académica del ex presidente Alfonso López Michelsen, muchas profesoras se vincularon a la universidad sin tener el título profesional. Es así como antes de vincularse a la UdeA, ya se había ganado una plaza de profesor de cátedra en la Universidad Nacional (Sede Medellín), en abril del mismo año, la cual también conserva en la actualidad con todas las prestaciones legales.

Cabe destacar que Norman Mercado fue profesor de bachillerato en Medellín desde el año 1972 hasta 1977, vocación que desempeñaba para mejorar su sustento económico, y también se ayudaba dictando clases particulares de matemática.

Como Norman César realizó su carrera universitaria en nueve semestres, tuvo que dictarle clases a sus compañeros de la misma promoción. En su primera sesión nadie le entendió porque presentó muy rápido el tema “en media hora y nadie entendió. Me tocó repetir la clase. Y con esa experiencia en Ingeniería aprendí que la clave para dictar mis clases es tener disciplina estudio”, confiesa el profesor Norman luego de más de 40 años de recorrido docente. Refuerza diciendo que además de la aptitud se requiere documentarse sobre los temas a dictar.

Me preocupo porque aprendan, les enseño las metodologías, me actualizo con las nuevas herramientas para docencia, y lo más importante: hago mis notas, porque todos mis cursos tienen un material: libro o reimpreso para que los estudiantes se preparen. Y últimamente en las clases virtuales las aulas semillas tienen videos. Cuenta con 31 videos de Ecuaciones diferenciales, 20 en Métodos numéricos, 19 en Matemáticas especiales y 25 en Circuitos II, “todos disponibles en Youtube”, enfatiza el profesor.

Además en su producción bibliográfica tiene textos como: Ecuaciones diferenciales, Matemáticas especiales, Métodos numéricos, Circuitos eléctricos I y II,  Matemáticas operativas (Ude@), todos en la UdeA y Notas para un curso de Cálculo diferencial, en la Unal.

Un profesor destacado
Por los cursos del profesor Norman Mercado han pasado miles de estudiantes de pregrado y posgrado, principalmente; muchos de los profesores que hoy en día son compañeros en la UdeA fueron sus pupilos.

A lo largo de cuatro décadas como profesor universitario, a Norman César Mercado Cruz lo ha distinguido como Maestro de Ingenieros en el año 2002, en la Facultad de Ingeniería de la UdeA; en 1999, 2001 y 2003 fue nominado al Premio a la Excelencia Docente de la UdeA. y en este último año ganó dicha distinción.

En el año 2015, el Rector de la Universidad Nacional, Ignacio Mantilla, le confirió la categoría Profesor Tenente de cargo, que a su vez es una distinción por los años de servicio.

Foto: Carlos Betancur, Facultad de Ingeniería

A la fecha en la Universidad de Antioquia el profesor dicta los cursos de: Ecuaciones diferenciales, Matemáticas especiales, Circuitos eléctricos II y Métodos numéricos; y en la Universidad Nacional de Colombia (Sede Medellín) sirve el curso de Cálculo diferencial, aunque también ha dictado los mismos de la UdeA. y adicionalmente Cálculo integral, Geometría y Matemáticas básicas.

“Para mí el reconocimiento más importante es el que diariamente me conceden los estudiantes en el salón de clase, y que al final del semestre muchos me dicen: ¡Gracias, Profesor!”, confiesa con orgullo Norman.