Portal U de A - Cabezote - WCV(JSR 286)
AccionesSignpost
AccionesOpinión
U de A - Buscador UdeA Noticias - WCV(JSR 286)
AccionesLos esbozos de paz truncada por la pesadilla del rearme
AccionesLos esbozos de paz truncada por la pesadilla del rearme
« ... Volver a la guerra, por tanto, desanima a los pacificadores y reoxigena la ultraderecha en sus pretensiones de desarticular de JEP y agudizar el militarismo, cuya ideología antepone la fuerza militar como fuente de toda la seguridad, que se opone directamente con los movimientos por la paz de los tiempos modernos ... »
El regreso a la clandestinidad de la cúpula del extinto grupo subversivo Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC- EP), que se dio después casi los tres años después de la firma de los Acuerdos de Paz de La Habana en Bogotá el 24 de noviembre de 2016, la han justificado como una “nueva guerrilla”, una vuelta a las armas, una versión reencauchada de ella.
El incumplimiento de los compromisos pactados hace que tal declaración no sea una posición insurrecta, se sale de la justicia transicional para entrar a la justicia ordinaria, aquella que no reconoce privilegios, ni se regula en tribunales de excepción. Solo gana la crisis social al sumarse al narcotráfico, minería ilícita, extorsión, secuestro, a la delincuencia común y a las demás actividades de los grupos armados ilegales.
Difícil será tomar el banderín filosófico de izquierda y autodenominarse "nueva guerrilla" si la historia ha demostrado y derrotado la poca viabilidad del socialismo en las tendencias políticas y económicas actuales del mundo y, a sabiendas de que la incredulidad de las masas ha cundido ante el fracaso del socialismo del siglo XXI en Latinoamérica que ha implementado una realineación ideológica, consecuencia del cambio de paradigma en curso en la economía en la que supone que es necesario un reforzamiento del poder estatal con visos de modelo capitalista-rentista para alcanzar una sociedad más justa y para avanzar el desarrollo; pero los estados que la han seguido y persisten en ese modelo están dentro de las países subdesarrollados, pobres del planeta y corruptos; y que además, los países que se pregonan comunistas”, viven o le hacen bisojos y guiños al capitalismo.
No es cuestión de echar culpas cuando se indigna a todos los amigos de la paz; más bien, el rearme puede ser consecuencia de varios factores: de los opositores con sus posiciones de derecha que no permitieron anclarse en el pensamiento diferente, en la indulgencia, la humildad y la solidaridad; más bien atizaron la polaridad social.
También de todos aquellos que tienen alma revanchista, inclemente, rencorosa y vengativa; además, de los que continúan viviendo de forma marginal cometiendo acciones delictivas de manera habitual en contra de la Constitución y la ley a pesar de las proposiciones de incorporación al camino de la paz, al retorno a la legalidad y la civilidad; igualmente de la JEP (Justicia Especial para la Paz, el componente de justicia transicional del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición por las violaciones de derechos humanos, vigente en Colombia desde marzo de 2017) que le faltó contundencia, rigor y celeridad; y por supuesto de aquellos que se acogieron a la JEP, y que por su mentalidad hampona, continuaron delinquiendo y del Estado que no ha cumplido ni ha trabajado con ahínco en lo pactado en el Proceso de Paz.
El retorno a la guerrillada niegan que la lucha desarmada es el camino del reconocimiento del otro; vedan la apreciación del dolor y del horror generado por las pérdidas de vidas y de la libertad; se califican de desvirtuadores de la esperanza, fanáticos de la guerra, desviadores de los puntos de encuentro, la tolerancia y la convivencia; se alejan de todas las alternativas constructivas de una sociedad mejor, con su pensamiento pleno de resentimiento se vislumbran amigos del desarraigo, de la desolación del campo, la polarización sociopolítica, del pensamiento único, la muerte y de la sangre; con su espíritu de vendicta llevan a una guerra fratricida que aniquila los senderos hacia una sociedad progresista, equitativa y pacífica.
Distanciados del disenso y del variopinto ideológico, el resurgimiento anacrónica de nuevos grupos alzados, acrecentará la guerra de guerrillas en las montañas y en los espacios urbanos en nombre de la anhelada paz, justicia y equidad; esa táctica de guerra asimétrica difícil de neutralizar gracias a su fácil dispersión, movilidad, habilidad para fundirse y de mimetizarse entre la población civil; se editarán nuevos capítulos sangrientos de la saga colombiana inextinguible y, partiremos de este mundo sin dejar a la descendencia los sueños rancios de los esbozos de una paz en construcción y aún muy incipiente.
Los desertores se llevan las verdades al monte y crean un efecto dominó que afectará como partido político a la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC), influirá en las votaciones en los comicios futuros; desalienta, mina el proceso y replanteará los acuerdos de paz; robustecerá las diferentes frentes de las disidencias de la FARC – EP al citar su vinculación con ellas; fortalecerá el discurso derechista de derogar o recortar las competencias de la JEP, más aun, por haber impedido, al lado de las otras cortes, la extradición de los cabecillas a los Estados Unidos; podrían endurecer el actuar terrorista y revolucionario al asociarse con el grupo sedicioso ELN, Ejército de Liberación Nacional, organización guerrillera de orientación marxista-leninista, participe desde 1964, conocedora de los conflictos de la Colombia profunda y actualmente amparada a través de la frontera porosa con Venezuela y escondrijo de los disidentes y desertores.
Volver a la guerra, por tanto, desanima a los pacificadores y reoxigena la ultraderecha en sus pretensiones de desarticular de JEP y agudizar el militarismo, cuya ideología antepone la fuerza militar como fuente de toda la seguridad, que se opone directamente con los movimientos por la paz de los tiempos modernos. Desistir la lucha por la paz es la peor afrenta que se les puede hacer a la democracia, persistir en el camino de la paz es la mejor ofrenda para seguir luchando por una sociedad más democrática que, aunque imperfecta, impregnada de sanguijuelas de la corrupción, de desigualdad imperante e injusticia inhumana, pero es democracia.
Mientras se perpetúen los ideólogos de la violencia de los extremos políticos, se cosechará solamente una sociedad enferma y violenta. Sólo queda, tan siquiera, persistir en la implementación del proceso truncado de paz para darles garantía y reivindicar a todas las víctimas, poseer la templanza y sabiduría para respaldar, animar y acompañar al 80-90% de los excombatientes desarmados.
Nota
Este es el espacio de opinión del Portal Universitario, destinado a columnistas que voluntariamente expresan sus posturas sobre temáticas elegidas por ellos mismos. Las opiniones aquí expresadas pertenecen exclusivamente a los autores y no reflejan una opinión o posición institucional de la Universidad de Antioquia.
Portal U de A - Redes Sociales - WCV(JSR 286)
AccionesPortal U de A - Datos de Contacto (Noticias) - WCV(JSR 286)
AccionesPortal U de A - Comentarios de Facebook - WCV(JSR 286)
AccionesListado Lo más popular
Acciones-
Academia Sociedad
¡Atentos! Este viernes, 5 de abril, cierran las inscripciones al proceso de admisión de la UdeA
01/04/2024 -
Academia Sociedad
En el periodo de recursos de reposición, una décima candidatura fue acreditada para la rectoría UdeA
16/02/2024
Footer - Udea - JSR(286)
AccionesPortal UdeA - Iconos Footer - WCV(JSR 286)
AccionesRecepción de correspondencia: calle 70 No. 52 - 21 | Apartado Aéreo 1226 | Dirección: calle 67 No. 53 - 108 | Horario de atención
Conmutador: [57 + 604] 219 8332 | Línea gratuita de atención al ciudadano: 018000 416384 | Fax: [57 + 604] 263 8282
Peticiones, quejas, reclamos, sugerencias, denuncias, consultas y felicitaciones
Política de tratamiento de datos personales
Medellín - Colombia | Todos los Derechos Reservados © 2020