Opinión

A finales de la primera semana del mes de julio falleció en la ciudad de Bogotá el Dr. Galo Armando Burbano López, académico y jurista que dedicó su vida al impulso de la educación superior en Colombia.

A finales de la primera semana del mes de julio falleció en la ciudad de Bogotá el Dr. Galo Armando Burbano López, académico y jurista que dedicó su vida al impulso de la educación superior en Colombia.

Dentro de los cargos que ostentó en vida se pueden contar las rectorías de la Universidad de Nariño, la Universidad Pedagógica Nacional (UPN) y la Universidad Manuela Beltrán. De igual manera estuvo en calidad de Director General del Icfes en dos períodos y presidió por espacio de 12 años la Asociación Colombiana de Universidades - Ascun-. Sin duda alguna el Dr. Burbano es uno los pocos colombianos que logró tener una trayectoria coherente, haciendo aportes a la construcción de la política pública en educación superior de Colombia.

Sin embargo, quiero referirme al legado que el Dr. Burbano deja al país relacionado con la creación del Premio Nacional de Educación Francisca Radke. Siendo rector de la UPN, el Dr. Burbano apoyó la creación de la Fundación Francisca Radke con el fin de apoyar a la Universidad Pedagógica Nacional y contribuir al desarrollo de la educación del país. Con el tiempo, en el año de 1996, la Fundación asume la creación del Premio Nacional de Educación Francisca Radke como un reconocimiento a los educadores que han realizados aportes significativos al país y a los estudiantes de las facultades de educación cuyos trabajos de grado en los campos de pregrado, especialización, maestría y doctorado merecen ser resaltados por sus contribuciones a la educación en Colombia. El premio lleva el nombre de Francisca Radke como homenaje a la educadora alemana que llegó a Colombia a comienzos del siglo XX como parte de la Segunda Misión Alemana. Dentro de los aportes de Francisca Radke a la educación colombiana se encuentra la creación del Instituto Pedagógico Nacional para señoritas en la ciudad de Bogotá.

Desde el año de creación del premio en 1996 a la fecha se han realizado 15 versiones del mismo, que han permitido exaltar y poner como ejemplo de educadores emblemáticos, entre otras personas, a los académicos Augusto Franco Arbeláez (qepd), Bernardo Restrepo Gómez, Fernando D´Janón Rodríguez, Carlos Eduardo Vasco Uribe, Guillermo Hoyos Vásquez (qepd) y Alberto Echeverri Sánchez.

En el año 2006 la Universidad de Antioquia, a propuesta de la Facultad de Educación, ingresa al comité convocante del premio, con lo que las últimas convocatorias se han realizado de manera conjunta entre las tres instituciones: Universidad Pedagógica Nacional, Universidad de Antioquia y la Fundación Francisca Radke.

En estos 20 años de creado el Premio Nacional de Educación el aporte del Dr. Galo Burbano, como impulsor, animador y miembro de la junta Directiva de la Fundación Francisca Radke fue definitivo para que el premio se mantenga en el tiempo a pesar de los altibajos que han traído consigo los cambios de los directivos de las universidades que respaldan académicamente el premio. De aquí que el mejor homenaje que las instituciones de educación superior, como la Universidad Pedagógica Nacional y la Universidad de Antioquia, pueden hacer a la memoria del Dr. Galo Burbano es el de fortalecer y seguir impulsando las convocatorias del Premio Nacional de Educación, elevando el premio a la categoría de política institucional que blinde las convocatorias de los cambios administrativos de estas dos instituciones, logrando con esto perpetuar en el tiempo el reconocimiento a las personas que han realizado aportes destacados a la formación de maestros en Colombia y resaltando los mejores trabajo de grado que se realizan en las facultades de educación, como una forma de reconocimiento social para estas instituciones.

Este texto fue publicado en el periódico El Mundo el lunes 18 de julio de 2016

Nota

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