Vida

Foto: Julián Roldán. Trabajo ´Aquí´, realizado en Medellín en 2013 a partir de la presencia de pumas cerca a la ciudad.

El viernes 18 de noviembre de 1949 hubo una gran agitación entre los habitantes de Amalfi. La brigada de cinco hombres que había salido al monte regresaba victoriosa, cargando el cuerpo sin vida de un tigre que había devorado vacas, cerdos y caballos. 

La población estaba atemorizada por la presencia del animal desde hacía varios meses y según la historia, ese día hubo una gran celebración con pólvora y músicos. Desde entonces, el tigre se convirtió en una insignia de la cultura y la identidad amalfitana. En el parque central de ese municipio, a falta de una, hay dos esculturas que lo evocan.  

El tigre de Amalfi es en realidad un jaguar, el felino más grande de América, que se encuentra en vía de extinción. Justamente la relación entre el hombre y los grandes felinos ha sido un tema constante de reflexión y fuente de inspiración para la artista Sara Herrera Fontán, quien llevará su propuesta artística a Amalfi, entre el 24 y el 26 de mayo, en el marco de Diálogo de Saberes y Nexus. 

Esta maestra en Artes Plásticas, egresada de la Universidad de Antioquia, ha creado varias series dedicadas a los felinos, entre ellas Vaca Sagrada en 2012, y Aquí, obra ganadora de una de las Becas de Creación de la Alcaldía de Medellín en el año 2013, la cual fue concebida a partir de la presencia de pumas en los bosques que rodean el Valle de Aburrá. 

Su propósito con la obra es entender el significado pasado y presente que para los habitantes de Amalfi tiene el símbolo del jaguar (tigre) y generar nuevos sentidos de cercanía y de relación con el entorno natural. 

Desde su percepción, el tigre podría simbolizar para ellos el triunfo del ser humano sobre un animal muy poderoso, la dominación del hombre sobre la naturaleza salvaje para poder sobrevivir. Sin embargo, plantea que ahora las cosas son diferentes, pues es esa naturaleza la que está debilitada y el animal super poderoso es el ser humano. 

Su propuesta consiste en una serie de intervenciones, siluetas de jaguares caminando por el pueblo, plasmadas con la técnica de laminilla dorada sobre los muros de varias casas que se encuentran ubicadas en una calle transitada del municipio y que conduce a la plaza central. Esto lo realizará con la ayuda de un grupo de amalfitanos voluntarios interesados por el arte y el medio ambiente. 

En su propuesta para Amalfi y a partir de la experiencia con la obra Aquí, Sara escribió que “los grandes felinos indican y garantizan el equilibrio del ecosistema; cuando éste se rompe, ellos son los primeros en desaparecer”, y agregó que “a través del arte me propongo contribuir a su supervivencia y a la conservación del entorno natural”. 

En un municipio como Amalfi la población vive cerca de los jaguares. En los últimos años se han reportado avistamientos de estos felinos por parte de campesinos y ganaderos, se dice incluso que han sido cazados por los lugareños, por la amenaza que podrían representar para sus niños pequeños. 

Ante esto, la autoridad ambiental Corantioquia ha desplegado campañas y capacitaciones con pautas y protocolos para que sepan cómo ahuyentarlos en lugar de matarlos. Su cacería está prohibida y es penalizada por la Ley 1774 de 2016 que castiga el maltrato animal en Colombia. 

Según Albeiro Berrío, director de la Casa de la Cultura de Amalfi, con el paso del tiempo y cada vez más, se ha desarrollado una importante conciencia entre la población sobre la situación de estos animales y su necesidad de protegerlos. 

Su presencia cerca de áreas urbanas se debe a la pérdida de su hábitat por la expansión de la frontera agrícola, las explotaciones mineras y los proyectos hidroeléctricos en la zona. Además, a la falta de presas naturales, muchas de ellas también cazadas por el hombre, lo que los ha llevado a buscar animales domésticos como alimento.  

Una de las iniciativas más importantes para proteger esta especie es la creación de un Corredor del Jaguar, liderada por la Fundación Panthera y que vincula a 13 países desde México hasta Argentina. El corredor en Colombia pasa desde el Norte al Sur del país, e incluye varias regiones de Antioquia, entre ellas el Nordeste, de la cual hace parte Amalfi. 

A través del arte, el dibujo y la pintura, Sara Herrera Fontán hace también su aporte para salvaguardar a los grandes felinos. Ella cree que con el trabajo que realizará con los jóvenes de Amalfi podrán convertir el símbolo del tigre (jaguar) en un pretexto para mantener una relación más respetuosa y armónica con el entorno natural. 

Sara Herrera Fontán estará en Diálogo de Saberes y Nexus, un encuentro académico y cultural que se realizará en Amalfi del 24 al 27 de mayo. Toda la programación aquí.