Opinión

Dentro de los programas que la ciudad de Medellín puede mostrar para ilustrar lo que es una política pública está el Premio a la Calidad de la educación, iniciativa que nació en la administración del alcalde Sergio Fajardo con el apoyo de Proantioquia y la Facultad de Educación de la Universidad de Antioquia. Se cumple este año doce años continuos de implementación de este programa al que se han sumado tres administraciones de la ciudad de manera consecutiva.

Ver columna relacionada: Los Premios ciudad de Medellín a la calidad de la educación: diez años bien cumplidos

El programa premios a la calidad de la educación ha servido para identificar las buenas prácticas que ofrecen instituciones públicas y privadas, así como reconocer las innovaciones que aportan profesores y estudiantes en diferentes campos de la educación; pero también ha servido para que Medellín desarrolle un sistema de medida que da cuenta de indicadores asociados a la calidad, más robusto que el presentado por el Ministerio de Educación Nacional (Indice Sintético de Calidad Educativa-Isce). Bajo el liderazgo de la Vicealcaldía de Educación de la administración de Aníbal Gaviria, se desarrolló el Indicador Multidimensional de Calidad Educativa (Imce), que contempla lo que mide el Isce y agrega elementos adicionales que permiten leer otros aspectos que dan cuenta del progreso que presentan las diferentes instituciones educativas año tras año.

El Imce valora de tres dimensiones que dan cuenta del estado de cada institución en el momento de la medida, como lo es el rendimiento académico medido a través de los resultados de las pruebas saber e indicadores de eficiencia interna como tasa de promoción y graduación de población en edad normal; el progreso académico de cada institución medido al comparar cuantitativamente los resultados agregados de los estudiantes de la institución educativa en las pruebas saber, particularmente en lenguaje y matemáticas; y el ambiente escolar de aprendizaje medido a través de la percepción de los estudiantes, profesores y los padres de familia con respecto a las expectativas académicas, participación, comunicación y seguridad y respeto.

Ver columna relacionada: Mejora la educación mejorando las pruebas Saber

Según el proyecto presentado al Concejo de Medellín para derogar el Acuerdo 001 de 2014  "Por el cual se dictan disposiciones sobre el "Premio Ciudad de Medellín a la Calidad de la Educación" y en su lugar proponer el “Programa Reconocimiento al Mejoramiento Educativo para la Calidad, Ciudad de Medellín”, lo que cambia en la política de los premios es pasar del concepto de excelencia al de reconocimiento al progreso, en la medida que al parecer las instituciones que pueden obtener los estándares de excelencia son limitadas y en algunos casos han sido merecedoras en más de una ocasión de este reconocimiento (es el caso del Colegio Montesorri). Con esta iniciativa ya aprobada en el Concejo de Medellín se busca posibilitar una “mayor equidad en la inversión, se crean nuevas categorías, [se] mejor [a] distribución de los recursos y se democratiza más el reconocimiento desde lo simbólico y económico, además, se precisan aspectos de las categorías y de los estamentos del programa como son el Comité y el Jurado en lo relativo a su composición y funciones, entre otros.”

Ver columna relacionada: El 74 por ciento de los estudiantes de Medellín van a colegios públicos

A lo largo de estos doce años, los diferentes alcaldes se han comprometido a fortalecer esta política pública, no obstante, han introducido cambios y/o énfasis de acuerdo con su visión sobre la calidad de la educación y/o los mecanismos para fortalecerla. En esencia considero que los cambios introducidos para el Premio, hoy denominado Programa, permiten el reconocimiento de dinámicas institucionales que merecen darse a conocer y distinguir. En su esencia la política pública no cambia y se adapta a nuevas miradas sobre la educación y a lo que el Secretario de Educación, profesor Luis Guillermo Patiño, considera como una agenda centrada en lo pedagógico.

Ver columna relacionada: Una agenda centrada en lo pedagógico para Medellín

Este texto fue publicado en el periódico El Mundo el martes 15 de agosto de 2017

Nota

Este es el espacio de opinión del Portal Universitario, destinado a columnistas que voluntariamente expresan sus posturas sobre temáticas elegidas por ellos mismos.  Las opiniones aquí expresadas pertenecen exclusivamente a los autores y no reflejan una opinión o posición institucional de la Universidad de Antioquia.