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Medellín, 20 de diciembre de 2022

Por: Ana Karina Muñoz, estudiante del pregrado en Periodismo

Desde la Dirección de Relaciones Internacionales, con el apoyo de la Fundación Universidad de Antioquia, se realizó la convocatoria para el programa “La región se mueve por América Latina” cuyos resultados se conocieron este mes de diciembre. De nuestra Facultad, la estudiante Mónica Mosquera del pregrado Comunicación Social – Periodismo de la seccional de Apartadó, es una de las beneficiadas para realizar un intercambio académico en la Universidad de Rionegro de Argentina. 

Este programa ofreció 11 estímulos académicos, cada uno por 8.202.500 de pesos colombianos para tiquetes aéreos y gastos de manutención para los estudiantes que realizarán un intercambio en América Latina. 

Mónica, que culminará su cuarto semestre del pregrado en el mes de febrero, cuenta que desde que inició su carrera, se interesó por los programas de intercambio: 

“Me llama mucho la atención el poder conocer otras culturas, viajar y a la vez educarme. Desde que entré estaba pendiente de los correos de la universidad, también del portal. Efectivamente una vez me llegó un correo de movilidad e ingresé, pero cursaba segundo semestre por lo que no me daba. Entonces seguí estudiando normal y esperé que otra vez me llegara alguna convocatoria. Cuando me llegó, recuerdo que ese día programaron una reunión aquí en la universidad y solamente llegamos dos mujeres, y estábamos con la señorita María Vanegas Vanegas, asesora de cooperación académica. Ella fue la que nos dio ese día la charla. Yo tenía clase, entonces no me pude quedar hasta el final, sin embargo, todo lo que escuché fue muy productivo y comencé a hacer la gestión. Empecé a leer y a buscar los documentos que necesitaba, porque hay varios requisitos. Son tantos al igual que  las condiciones, como por ejemplo el promedio, el porcentaje de la carrera y otros que hay que ir buscando para tenerlos a la mano y no perder tiempo, como el trámite del pasaporte, que estaba tratando de conseguirlo y siempre se cerraban las citas, entonces era lo único que no tenía. Pero desde Relaciones Internacionales de la Universidad me apoyaron con la expedición de una carta, viajé a Montería, me tocó esperar bastante, pero gracias a Dios a los días me llegó el documento.

¿Cómo fue la elección de la universidad para el intercambio? 

“Primero debía ver que fuera una universidad con convenio con la UdeA y que estuviera ubicada en alguno de los países a los que se pudiera aplicar de América Latina, como Chile, México, Argentina y otros. De todos, los que me llamaron la atención fueron Argentina y Brasil, pero además de ver qué en ambos hubiese una universidad que también tuviera convenio con la nuestra, también debía contar con mi carrera o una similar para que las materias que yo viera allá se homologaran a mi regreso. Entonces hice un rastreo de las que aparecían allí, cuáles eran las que tenían convenio y qué carreras tenían. Entonces empecé a buscar en Argentina, vi la Universidad de la Plata, muy chévere pero no tenía algo como mi carrera, y luego llegué a la Universidad Nacional de Rionegro, donde estaba la carrera Licenciatura en Comunicación Social, entonces ya ahí dije esta es”.

¿Cómo fue el proceso de gestión para hacer un intercambio?

“El proceso no es difícil, pero requiere de disciplina y tiempo. Es concentrarte en que eso es lo que quieres hacer y administrar tu tiempo. Primero estuve con todo el tema de la papelería para la beca, porque no siempre tiene el mismo plazo que aplica para el intercambio. Primero me llegó la información de la beca, que pasé a lo de movilidad por América Latina, y luego la carta de aceptación de la universidad de destino. A algunos les pasa diferente. Entonces desde Relaciones Internacionales me ayudaron con la carta para agilizar el proceso del pasaporte, y otros papeles. Uno va haciendo conexiones en la universidad que sirven, por ejemplo, yo necesitaba el historial académico que no se puede descargar del portal, sino que hay que ir a hasta la administración, pero antes hacer un pago como de 7 mil pesos. Acá en Apartadó justamente no estaba esa semana la secretaria, entonces con mi profesor de Voleibol que entrena unos días en Turbo, aproveché que él estaba allá, le pedí el favor, le envié el comprobante y él me trajo el documento desde allá.

Esto sumado a los papeles que debe gestionar uno mismo. Por ejemplo, había uno sobre trabajo comunitario, entonces tocó presentar cartas que avalaran eso, y que informaran con qué rol y por cuánto tiempo. Yo fui reina de la comuna 2 de Apartadó, que integra los barrios Brisas, Primero de Mayo y Obrero. Cuando gané ese reinado hacía actividades con los niños, jóvenes y adultos mayores. Como hasta ahora no se ha vuelto a hacer el reinado, sigo siendo reina todavía. Todo ese proceso me sirvió mucho porque la Junta Comunal del Barrio Obrero me hizo una carta, tanto de reconocimiento artístico como de proceso comunitario. En el municipio de Riosucio, Chocó, fue igual, yo fui reina en 2019 y entregué corona en 2022 por la pandemia, entonces ellos también me hicieron una carta. Me gradué de actuación y modelaje, estuve en una pasarela, donde varias de las diseñadoras me entregaron un certificado que también me sirvió como reconocimiento. O sea, toda mi vida y todos mis estudios me sirvieron en este proceso, porque de allí fui sacando papeles que me solicitaban allá, como reconocimiento artístico y deportivo. Yo cursé una tecnología en entrenamiento deportivo e hice mis prácticas como entrenadora de voleibol, entonces esos cursos, las prácticas y los torneos a los que fui me sirvieron como reconocimiento deportivo”.

¿Qué mensaje les daría a los demás estudiantes que desean hacer un intercambio?

“Yo les enviaría un mensaje de que sí se puede, de que no tengan miedo y si lo tienen, igual se arriesguen. De qué aprovechen su tiempo libre y hagan actividades que les enriquezca porque uno no sabe cuándo le vayan a servir. Yo todo lo hago porque me gusta, y ahora me está dando frutos. Entonces que aprovechen su tiempo en entrenar, en hacer actividades con la comunidad, con la universidad. Que vayan haciendo conexiones, que de alguna u otra manera les puedan servir. Perdemos muchas oportunidades de salir, de que nos apoyen, porque no las vemos y no vamos a ellas, entonces toca ir en su búsqueda. Yo pensé, si no pasó me darán una retroalimentación para la próxima y espero para intentarlo, y si paso pues lo hago. Muchas veces como jóvenes nos quejamos de que no hay oportunidades, pero sí las hay, toca es ir a buscarlas. Las queremos en bandeja de plata, pero hay que estudiar y prepararse para que cuando estas lleguen, estemos preparados para acceder a ellas".

Los criterios de postulación para acceder este beneficio, fueron el promedio académico, que significa un 50% de la evaluación total, actividades extracurriculares y reconocimientos con un 20%, carta de participación y reconocimientos de trabajo comunitario cada uno con un 15%, sumando así el 100% correspondiente. 

La Facultad de Comunicaciones y Filología felicita a Mónica por este logro, esperamos esta sea una experiencia llena de aprendizajes que repercuta tanto en su vida profesional como personal.