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El avance de la iniciativa de género en Amalfi, llevó a consultar cómo ha sido el abordaje de estos asuntos con la Secretaría de las Mujeres de la Gobernación de Antioquia y también con la Corporación Región, cuyo resultado arrojó que el Nordeste antioqueño “es una de las regiones más golpeadas por la violencia de género y la violencia sexual en mujeres; entonces ahí dijimos: hay una razón de peso para llevar la iniciativa, específicamente a la región”, específicamente en Amalfi y en Anorí. Así lo manifiesta Sandra Milena Restrepo Cuartas, Coordinadora de Extensión de la Dirección de Regionalización. 

Abordar la temática de género desde una perspectiva generacional 

En Amalfi el trabajo se realizó durante mayo a septiembre del 2023, en una articulación entre la Universidad de Antioquia y el colectivo Siempre Vivas, el cual está integrado por mujeres, algunas de ellas egresadas y estudiantes del campus Amalfi. Este colectivo ha realizado diferentes acciones de educación y movilización social que inciden en reflexionar sobre la equidad de género en el municipio.  

Hablar sobre el cuerpo con las niñas 

Las charlas y talleres realizados con este público, incluyó la asistencia de niñas entre los 8 y 13 años. Con ellas “hemos encontrado que las niñas hoy en día ya tienen muchos más conocimientos sobre sus cuerpos, como que hay un acceso mucho mayor a cierta información”, según Jennifer Giraldo Pérez, antropóloga y encargada de orientar el desarrollo metodológico en Amalfi. 

Con la iniciativa, tuvimos la intención de que las niñas se empoderen de sus cuerpos. Allí se encontró que “sigue habiendo un desconocimiento, sigue habiendo miedos, tabúes frente a asuntos como el tema de la menstruación, asuntos de cuáles son los límites de su cuerpo con respecto a las personas adultas. Entonces lo que buscábamos en los talleres era que las niñas también puedan reconocer su cuerpo, pero también que aprendieran a poner límites de quien no debe tocarlas, cómo deben hacer respetar su integridad al tiempo de que perdieran el miedo a su cuerpo”, agregó Jennifer. 

Ser mujer joven y diversa

En el caso de las mujeres jóvenes, el proceso se llevó a cabo a través de un cineforo, donde se trabajó con mujeres adolescentes y adultas jóvenes, pertenecientes a un equipo de fútbol femenino del municipio. Lo que se buscó con el ciclo de cine fue principalmente mostrar narrativas de la mujer, a partir del formato audiovisual, para mostrar otras formas de narrar las juventudes femeninas y la diversidad. Cada pieza audiovisual arrojó una serie de discusiones “que tenían que ver justamente con el tema del acoso sexual callejero, también hablamos sobre las disidencias sexuales y de género; digamos que fue un tema bastante sensible, que pudo expresarse en medio de un contexto seguro para hablar sobre experiencias personales difíciles”, agregó Jennifer. 

Otro aspecto positivo de abordar el tema de género a partir de las historias de vida de los diferentes documentales, fue que muchas de las participantes se sintieron identificadas, y ello es que al ver que sus proyectos y decisiones de vida reflejados en otras mujeres, ellas pudieron experimentar inclusión en una sociedad que tradicionalmente excluye a lo que no es tradicional y es diferente, frente a las orientaciones y preferencias sexuales, familias diversas, etc. 

La alimentación y la conversación con mujeres adultas 

Finalmente se realizó un proceso con mujeres adultas y madres en el municipio. El espacio de conversación sirvió para reflexionar sobre el surgimiento de los problemas familiares, y sobre los estereotipos que han estado en el rol de la mujer madre, “ellas son las mujeres que tienen que estar siempre en la casa, en el hogar, en la cocina; entonces reivindicamos la cocina como un espacio político”. Agrega Jennifer. La cocina es el lugar para el encuentro de las mujeres, para el encuentro con la otra, para un encuentro colectivo. 

La cocina es el lugar donde las mujeres se encuentran, conversan entre ellas y se convierte en un vehículo transformador para la vida de las mujeres.  

El camino que queda por recorrer: 

De este proceso que se realizó de manera exploratoria, queda una serie de retos por asumir. El más importante es que se sigan generando los encuentros, para que más mujeres niñas, mujeres jóvenes y mujeres adultas. Que se den las conversaciones en espacios seguros. 

También se pretende llegar a más públicos, “en este caso a públicos masculinos porque sabemos que los enfoques de género no solo tienen que ser sensibilizar a las mujeres, sino también a las masculinidades a nivel social, entonces también otro reto sería plantearnos otras metodologías donde los hombres también se vean involucrados en estas temáticas, también, de pronto incluir más temáticas desde las diversidades sexuales y de género, en este caso incluir entonces personas del territorio que se asuman desde la población LGTBIQ+”, complementa Jennifer. 

Conozcamos este resumen, que aporta la Corporación Adagio frente a este proceso.

El proyecto en cifras

- Participantes: aproximadamente 40 participantes (niñas, jóvenes y mujeres adultas)   

- Eventos realizados: 16 encuentros   

- Fechas: mayo a septiembre de 2023  

- Aliados que se articularon: 

Dirección de Regionalización - Sede Amalfi 
Facultad de Artes  
Corporación Adagio 
Colectivo Siemprevivas  
Grupo femenino Somos Fútbol  
Alcaldía de Amalfi - Secretaría de Salud