Cirugía de guerra para atender víctimas del conflicto
Cirugía de guerra para atender víctimas del conflicto
Desde 2012, el Comité Internacional de la Cruz Roja y la UdeA brindan a los residentes una cátedra en cirugía de guerra con contenidos sobre situaciones a enfrentar en el conflicto armado.
La cátedra en Cirugía de Guerra es un espacio en el que se proporcionan conocimientos básicos para los especialistas quirúrgicos en el manejo de heridas generadas por minas, proyectiles, o cualquier tipo de armas utilizadas dentro de una guerra o un conflicto urbano.
Colombia ha vivido un conflicto armado por más de 50 años, lo que ha dejado un saldo de 218.094 muertos, 25.007 desapariciones forzadas, 1.754 casos de violaciones sexuales y 11.073 víctimas por minas, según datos publicados en el informe ¡Basta ya! del Centro Nacional de Memoria Histórica. De ahí la importancia de los diálogos de paz que se llevan actualmente entre el Gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia —FARC—, conversaciones que tienen toda la atención tanto nacional como internacional, debido a las implicaciones que podría traerle al país la firma de este acuerdo, convirtiéndolo en un momento decisivo para la historia y el futuro de toda la población colombiana.
Sin embargo, así se firme el acuerdo de paz y haya un cese al fuego, el país seguiría siendo un territorio minado, dado que este ha sido una de los mecanismos más utilizados por grupo armados; sembrar minas en zonas rurales y campesinas para atacar a la Fuerza Pública y en muchos casos a la población civil que reside en estos sectores.
Las minas antipersonal encabezarían la agenda en los temas de posconflicto, si se llega a dar, puesto que 31 de los 32 departamentos colombianos tienen minas sembradas en su territorio. El Gobierno y las FARC pueden llegar a un acuerdo de no más enfrentamientos, secuestros, reclutamientos forzados, pero durante más años las tierras colombianas seguirán estando minadas.
Las minas antipersonal, uno de los principales problemas en el conflicto colombiano
En nuestro contexto no solo se utilizan las minas industriales, también son empleados artefactos explosivos improvisados, contaminados con residuos orgánicos que generan infecciones graves en las víctimas. Las zonas rurales de los departamentos de Antioquia, Meta, Caquetá, Bolívar y Arauca son las más perjudicadas, puesto que son puntos clave para los actores armados y en ellos residen las poblaciones más vulnerables: indígenas, comunidades afro y campesinos.
Según la Dirección Contra Minas este es el total de víctimas en Colombia, desde 1990 hasta marzo de 2015.
Cifras de población civil y fuerza pública herida - muerta por minas antipersonal
Las minas antipersonal no son la única técnica implementada dentro del conflicto, existen también ataques con proyectiles, armas de corto y largo alcance, armas blancas, explosivos y crímenes de violencia sexual.
Para brindar ayuda social a las víctimas, la Universidad de Antioquia y el Comité Internacional de la Cruz Roja —CICR— concibieron hace cuatro años un curso en cirugía de guerra en el que se orienta a los estudiantes sobre cómo debe ser el abordaje de las consecuencias que deja el conflicto en el país y en las que se deben trabajar desde las universidades:
- El país está bajo conflicto, lo que genera un amplio número de lesionados y heridos de difícil manejo, sobre todo por minas antipersonal.
- El personal médico, específicamente los cirujanos y residentes quirúrgicos, son altamente entrenados en los hospitales universitarios en tratamientos ortodoxos, pero cuando hay un ambiente hostil, con recursos limitados y donde las circunstancias son precarias, se dificulta el escenario.
- La Universidad se compromete desde el punto de vista social, en que sus egresados y su perfil sea congruente con las necesidades del país.
"El propósito fundamental de este curso es que los estudiantes conozcan las diferencias del tratamiento de las heridas causadas por arma de fuego de alta y baja energía; las diferencias del tratamiento ortodoxo que se da desde los hospitales universitarios y el tratamiento de emergencia integral, que se puede hacer en otras circunstancias con recursos limitados, bajo condiciones precarias y ambientes hostiles. Esto, para que al final tengan la capacidad de determinar qué tratamiento le pueden ofrecer al paciente, uno ortodoxo, o uno abreviado, práctico y simple, que es lo que se hace en cirugía de guerra como tal”, explica Alejandro Moreno Rojas, profesor del Departamento de Cirugía de la Universidad de Antioquia y coordinador del curso.
Sin embargo, la intervención quirúrgica no es el único aspecto en el que se busca formar a los residentes. En esta cátedra también se hace hincapié en la atención integral al herido; es decir, brindarle al mismo tiempo cuidados psicológicos causados por traumas.
“Estamos en un país propenso a tener una de estas situaciones en cualquier momento; es demasiado importante que los profesionales quirúrgicos sepan hacer frente a una situación de conflicto, y a su vez tengan en cuenta los problemas psicosociales que esto genera. Fue una cátedra muy completa porque nos enseña a futuro, cómo trabajar con los pocos recursos que tengamos a la mano, saber lo mínimo y lo básico para atender a cualquier de estos pacientes”, expresa Daniela Sierra, residente de segundo año de Cirugía General de la Universidad CES.
De los campos de guerra de Somalia, Sudán, Afganistán y Pakistán, a Colombia
Una de las personas con mayor experiencia en el campo de la cirugía de guerra y que participó como docente de la cátedra fue Julio Guibert Vidal, cirujano de la Cruz Roja Internacional, quien con más de 10 años de experiencia asistiendo a heridos de diferentes países, producto de la guerra, habló sobre sus experiencias en diferentes conflictos del mundo y cómo le aporta esta cátedra a la formación de los residentes de Medicina que, debido al contexto en el que se encuentran, deben contar con una formación práctica y psicológica para atender a pacientes bajo condiciones precarias y arriesgadas, como las generadas por el conflicto armado colombiano.
¿Por qué se escogió a la Universidad de Antioquia para ser el epicentro de este curso?
Porque tenemos la obligación de cumplir con el compromiso social de la Universidad. Esta debe formar profesionales que sean útiles a la sociedad, golpeada por una ola de violencia, y las víctimas deben ser cuidadas de la mejor manera posible. La Universidad de Antioquia es pionera en el mundo por ser la primera en el mundo donde se ha dictado oficialmente este curso. Esta es la cuarta versión que desarrollamos en colaboración académica entre el Comité Internacional de la Cruz Roja y la Universidad.
¿Cuál es el objetivo principal de este curso?
Preparar al profesional de la salud de la Universidad de Antioquia para que pueda enfrentar un problema mundial, como son las heridas por arma de fuego y las explosiones. La violencia se ha globalizado y desde el CICR, con más de 50 años de experiencia en el manejo de los heridos, tenemos unos estándares que han funcionado muy bien y por eso se quieren aplicar a la población civil, para que los colegas estén preparados. En muchas ocasiones estos no tienen ni la preparación ni la aptitud para enfrentar este problema que es tan vital.
¿Qué les ofrecen los docentes y cirujanos del CICR a los estudiantes?
Nosotros damos las herramientas para poder enfrentar esta problemática porque no es solamente cirugía, es cómo estabilizar un paciente para que pueda llegar a la mesa de un procedimiento quirúrgico, cómo manejar al paciente en la fase inicial y, a su vez, cómo se debe manejar la parte psicológica del mismo y el proceso de rehabilitación. También se habla mucho de lo que es la mina antipersonal y de los manejos de los heridos causados por ella, que es bastante específico. Al final es un intercambio y una enseñanza de experiencias.
¿Qué es lo más complicado para un cirujano de guerra?
Un cirujano de guerra debe estar preparado, más que con teorías y técnicas que son completamente indispensables, psicológicamente, porque lo que le tocará enfrentar es fuerte y puede llegar a ser traumático. Significa que se debe adecuar a los protocolos para estas situaciones y otras que pueden ser nuevas para médicos, cirujanos y enfermeras, como es la llegada masiva de heridos a un centro médico. Eso obliga a hacer lo mejor para la mayoría, lo que a veces ocasiona muertes de personas por las que no podemos hacer mucho, porque en una emergencia así no se atiende a un paciente como es lo normal, sino a diez al mismo tiempo.
Fuentes bibliográficas
Centro de Memoria Histórica. (2012). Estadísticas del conflicto armado en Colombia. Consultado el 10 de abril de 2015 de: http://www.centrodememoriahistorica.gov.co/micrositios/informeGeneral/estadisticas.html
EFE. (2014). Asociación internacional pide garantizar derechos de víctimas de minas antipersonal. El espectador, Digital. Consultado el 10 de abril de 2015: http://www.elespectador.com/noticias/nacional/asociacion-internacional-pide-garantizar-derechos-de-vi-articulo-484870
Portal U de A - Redes Sociales - WCV(JSR 286)
Portal U de A - Datos de Contacto (Noticias) - WCV(JSR 286)
Portal U de A - Comentarios de Facebook - WCV(JSR 286)
Listado Lo más popular
-
Academia Sociedad Cultura
Biblioteca de la UdeA se enriquece con herencias de intelectuales
19/05/2025