Vendedores ambulantes de la Plazuela San Ignacio aprenden inglés gracias a la UdeA
Vendedores ambulantes de la Plazuela San Ignacio aprenden inglés gracias a la UdeA

Para que se formen en inglés y logren, con esta herramienta, una interacción más fluida con los extranjeros que visitan Medellín, la Escuela de Idiomas de la UdeA le abrió sus aulas a un grupo de 14 vendedores ambulantes que desde hace más de 30 años trabajan en la Plazuela San Ignacio, donde nació la Universidad hace 221 años. Este proyecto busca contribuir al aprendizaje de una segunda lengua en poblaciones vulnerables y reafirma el compromiso social de la Universidad.
Aunque desde hace cerca de ocho años el Centro de Extensión de la Escuela de Idiomas de la UdeA puso en marcha en varios municipios de Antioquia su Programa de Extensión Solidaria, este semestre puso la lupa en el corazón de Medellín a través del Programa de Inglés para Adultos –PIA—, del que ahora hace parte un grupo de vendedores ambulantes que trabajan en inmediaciones de la Plazuela San Ignacio, un simbólico espacio, porque fue allí donde nació en 1803 la Alma Máter.
El proceso académico beneficia a 14 vendedores ambulantes, en su mayoría adultos mayores, que por más de 30 años han habitado laboralmente este sector del centro de Medellín. «Es una oportunidad nunca antes ofrecida a esta población de vendedores ambulantes, quienes desde su oficio se han convertido en los guardianes de la Plazuela, del Paraninfo y en los narradores de la historia patrimonial del claustro educativo y del sector de San Ignacio», dijo Javier Rivera Arias.
Para el jefe del Centro de Extensión de la Escuela de Idiomas, esas son algunas de las razones por las que enseñarles inglés a estas personas representa «el cumplimiento de una tarea misional que acerca la Universidad a la ciudadanía y los empodera ante la llegada de turistas y visitantes».
Para ofrecerles este beneficio académico gratuito, la UdeA y la Asociación de Mercados Ambulantes —AMA, organización que reúne a los vendedores del Distrito de San Ignacio— firmaron un convenio mediante el cual las partes establecieron que que para conservar la gratuidad de los cursos, los estudiantes deberán garantizar la asistencia a por lo menos el 80 % de las clases y dedicar en sus tiempos libres dos horas semanales de repaso y práctica. Además, en caso de no aprobar los trabajos pedagógicos, los participantes perderán el beneficio académico y económico.
«Nunca en la vida habíamos soñado con esta oportunidad única que nos está regalando la Universidad de Antioquia, tenemos que aprovecharla al máximo y estamos conscientes de que el inglés es una herramienta para mejorar nuestras vidas y nuestros negocios», afirmó Blanca Orfidia Vásquez, presidenta de la Asociación de Mercados Ambulantes.
Inglés para todos, un reto de la Escuela de Idiomas
Con su Programa de Extensión Solidaria, desde hace cerca de ocho años, la Escuela de Idiomas había llegado ya a niños, jóvenes y adultos con sus clases de inglés, francés, italiano, alemán, portugués, japonés y lengua de señas colombiana —LSC—; sin embargo, esta es la primera experiencia con vendedores ambulantes.
Los participantes deberán cursar 18 niveles de inglés de 32 horas cada uno, y al culminarlos serán certificados por la UdeA y por las secretarías de Educación de Medellín y Envigado. «Al terminar las 576 horas de enseñanza, los estudiantes estarán formados en nivel B2, que rige las normas europeas, y tendrán el inglés como una herramienta de trabajo que mejorará la autoestima y abrirá nuevas oportunidades para sus negocios», concluyó Rivera Arias.
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